Seis de cada diez personas atendidas por Cáritas en Málaga son trabajadores o pensionistas con escasos ingresos según los datos que arroja su memoria de acciones realizadas durante el pasado año 2023, y que este jueves han dado a conocer en rueda de prensa.
A través de los servicios de acogida y acompañamiento de las Cáritas, en 2023 se han acompañado a 8.722 personas, una cifra muy similar a la de 2019 (8.856), antes de que la irrupción del Covid y la crisis socioeconómica disparara el número de demandantes.
Gracias a este acompañamiento, se han visto beneficiadas 20.638 personas, que han recibido un total de 54.407 ayudas. A pesar de este descenso, el 36% de las personas atendidas han acudido a Cáritas por primera vez y el 33,4% lleva más de tres años recibiendo el apoyo de Cáritas. El dato más esperanzador se encuentra en el 22,7% que ha conseguido mejorar su situación.
En cuanto a las unidades familiares, se han acompañado 8.003 hogares con realidades muy distintas. Así, el 36,7% de ellos están formados por parejas con hijos, el 20% por familias monoparentales y el 12,8% por personas solas.
Además, como es habitual, el porcentaje de mujeres atendidas (71,56%) es muy superior al de los hombres. Entre los principales problemas detectados en las personas que han acudido en busca de ayuda, el 86,74% de las personas atendidas han solicitado ayuda para cubrir necesidades básicas, mientras el 81,30% ha manifestado tener diferentes dificultades relacionadas con el mundo del empleo.
A la luz de los datos recogidos por las Cáritas parroquiales presentes en los barrios y pueblos de la diócesis, preocupan de manera especial tres cuestiones como son los trabajadores y pensionistas pobres, la vulnerabilidad de los migrantes, y la vivienda.
Así, el 48% de las personas que acuden a Cáritas en busca de ayuda realizan alguna actividad laboral, pero los ingresos que perciben son tan bajos que no les permiten cubrir sus necesidades básicas. De ellos, solo el 15,3% dispone de un contrato de trabajo.
Preocupa también la situación de un 9,8% de demandantes que reciben pensiones tan bajas que no les permiten hacer frente a los gastos cotidianos y vivir dignamente. Además, en estos casos, las posibilidades de mejora son bastante limitadas.
En cuanto a los migrantes, en los últimos cinco años, el número de personas migrantes acompañadas ha aumentado un 14% hasta situarse en el 57,9% del total de personas atendidas en 2023. Además, de ellas, el 43% se encuentra en una situación administrativa irregular.
En apoyo de estas personas, Cáritas Diocesana ha colaborado con la recogida de firmas para conseguir la consideración de la Iniciativa Legislativa Popular en el Parlamento para la regularización extraordinaria de personas migrantes.
En cuanto a la tercera problemática, las dificultades para hacer frente al pago de la vivienda alcanza a casi la mitad de las personas atendidas. En concreto, han manifestado este problema el 47,3%. El aumento de personas que viven en habitaciones realquiladas y, en buena parte de los casos, compartidas, suponen ya el 19,9% del total.