El vicesecretario de Coordinación Autonómica, Local y Acción Electoral del PP, Elías Bendodo, ha asegurado este viernes que Málaga «no va a conseguir solucionar sus problemas de movilidad con un ministro como Óscar Puente, que lo que se dedica es a dar voces, gritos y ser el vocero de Sánchez; no a otra cosa».
Así se ha pronunciado Bendodo en un encuentro organizado por la Cadena SER en Málaga, en el que ha aludido al mensaje de Puente en X en respuesta a Ouigo, apuntando que «ese es el nivel de un ministro, insultando a una empresa en redes sociales; eso es lo que tenemos hoy en día». «El que está al frente de la Infraestructura hay que echarle de comer aparte», ha dicho, ironizando con que tiene «la suerte» de que «todavía no me ha bloqueado».
Para el líder del PP, «hoy a España la están gobernando los ayuntamientos, las diputaciones y las comunidades autónomas», frente a un Gobierno central, que «ni está ni se le espera» en Málaga, lamentando que el Ejecutivo haya decidido no presentar presupuestos generales y las consecuencias que esto tendrá para Andalucía y, en concreto, para la provincia.
Según ha señalado, «el único proyecto real que ha hecho Pedro Sánchez en Málaga, que él haya ideado y que haya ejecutado» es «cambiar el punto kilométrico de las A-7», apuntando que «la antigua Nacional 340 empezaba en Cádiz y terminaba en Málaga y ahora empieza en Barcelona y termina en Cádiz».
«Pocas inversiones y poco cariño», ha señalado el líder del PP, quien ha incidido en que por parte del Ejecutivo central «nada del tren litoral, nada de las carreteras, nada del techo de la Catedral, en lo que no va a participar». «El Gobierno no ha hecho nada aquí», ha incidido.
«El cariño del socialismo con Málaga es mínimo, cero, no está a la altura de la ciudad, no está a la altura de la previsión de crecimiento y atractivo inversor que tiene esta ciudad, y evidentemente todo tiene que ir acompañado de inversiones», ha dicho.
Bendodo ha incidido en que «al problema de movilidad habrá que buscarle soluciones», por los continuos atascos en las carreteras malagueñas, aunque ha señalado su preocupación por que «incluso habiendo presupuestos, no sé si esas obras necesarias estuvieran incluidas». Ha apuntado que Málaga es una de las áreas metropolitanas en España, junto con Madrid, donde se va a aumentar la población en la próxima década «y eso hay que tenerlo previsto y en cuenta».
Respecto al tren litoral, ha lamentado que se lleva hablando mucho tiempo sobre cómo llevarlo a la Costa del Sol y «ahora llega un secretario de Estado y nos dice que no hay nada, ni un papel de este proyecto y que no existe ninguna idea del Gobierno en llevar el tren a Marbella y a Estepona, cuando hay infinidad de papeles, proyectos, reuniones, anteproyectos e ideas».
En cuanto a la sequía, «ahora mismo el principal problema que tienen Andalucía y España», ha apuntado a la necesidad de inversiones y ha recordado que todos los gobiernos del PP han propuesto un Pacto Nacional por el Agua; «y creo que esto tiene que estar por encima del debate político».
«Al final estamos hablando del pan del día a día; que la sequía no es que no te puedas bañar en una piscina, que también; sino que es que te cierren o que te limiten el suministro de agua a la industria», ha apuntado.
Bendodo ha considerado que para resolver el problema de la sequía en Málaga «hace falta que los tres motores funcionen a tope; el de la Junta de Andalucía, que está invirtiendo; el de la Diputación, invirtiendo; y el del Gobierno de España, que no está invirtiendo en temas de agua por el simple hecho de que no están en sus prioridades».
Al respecto, ha señalado que la Junta de Andalucía ha movilizado 400 millones de euros en materia hídrica. Asimismo, ha destacado la gestión del Ayuntamiento de la capital y del regidor Francisco de la Torre, «el mejor alcalde de España»; y de la Diputación, con un gobierno liderado por Francisco Salado, «que trabaja para los malagueños» y que es «un motor de desarrollo de la provincia, un elemento fundamental para la vertebración territorial, la cohesión territorial y que no se nos queden vacíos nuestros pueblos».
Ha considerado que «el gran objetivo de las diputaciones para los próximos años es ser esa herramienta que facilite inversiones, empleo, llegada de empresas para que la gente se quede en su pueblo, porque al final uno quiere estar donde nació, pero si tiene oportunidades de trabajo».