El ciclismo profesional –y, sobre todo, el ciclismo malagueño– no olvidará que un lince marbellí, que durante 17 temporadas ha pedaleado por la provincia y todo el territorio español e incluso internacional, se retira. A sus 40 años, Luis Ángel Maté ha decidido poner fin a una carrera donde ha premiado el trabajo, la constancia y una forma de ser que siempre ha mantenido tanto encima de la bicicleta como en el resto de las facetas de su vida. Uno de los mensajes que ha querido subrayar en esta charla para ONCESOLES es que “el deporte es una escuela de valores maravillosa”. Reconoce, además, que si pudiera hablar con el Maté de hace 20 años le diría que siguiese pedaleando y, por encima de todo, “que disfrutase”.
Y dentro de todo lo que implica este deporte tan especial como es el ciclismo, donde las temidas caídas pueden terminar con carreras profesionales, lo más positivo es que Maté ha elegido cómo, cuándo y dónde finiquitar su trayectoria, concretamente con La Vuelta a España 2024, que tuvo mucho acento y recorrido malagueño gracias a la sexta etapa, con final en Yunquera, y la séptima, que salía desde Archidona: “Ha sido muy especial el paso por la provincia. Es mi tierra y tener esa oportunidad, porque no todos los años ocurre, lo he disfrutado al máximo”.
«El cicloturismo puede ser una actividad económica y una manera de desestacionalizar la Costa del Sol»
La Costa del Sol, el resto de la provincia, sus carreteras y caminos son su “oficina”. “Me siento muy orgulloso de mi tierra, de Marbella, de San Pedro, de Estepona, Casares, Manilva, Ronda, Los Reales, el Valle del Genal… Es mi terreno asiduo de entrenamiento, mi oficina como yo digo. Como ciclista, es una zona con unas bondades únicas en el mundo, yo he viajado y conozco muy pocos sitios iguales que este”, nos cuenta Maté, que reconoce que, entre uno de sus proyectos futuros, será “trabajar para traer cicloturistas a la Costa y a mi tierra porque creo que tienen unas posibilidades tremendas”. “Estas zonas tienen unas posibilidades magníficas y estoy convencido de que así lo van a entender las instituciones, cuando se den cuenta de que esto puede ser una manera extraordinaria de desestacionalizar y una actividad económica que traiga muchos puestos de trabajo. Estoy convencido de que en los próximos años vamos a ver más cicloturistas como en otras regiones y que va a ser muy beneficioso para todos”, añade.
Conciliar seguramente sea el verbo más difícil para los deportistas de élite, especialmente en el ciclismo. “Es muy complicado compatibilizar todo”, dice el ‘Lince Andaluz’, que incide en que “requiere muchísima dedicación, 24 horas al día durante siete días a la semana, pues el nivel es altísimo”. “La dedicación tiene que ser máxima, no se puede dejar ningún detalle al azar y eso lo convierte en un deporte duro, ya no por el hecho de dedicar todo a ello, sino por dejar todo aparte, que es lo más duro del ámbito profesional, pero lo he intentado llevar de la mejor manera posible”, zanja el marbellí, que admite ser un privilegiado: “La familia ha venido en mis últimos años de carrera profesional, pero evidentemente no es fácil pasar mucho tiempo fuera de casa, son muchos viajes, es prácticamente todo el año fuera y necesitas ese apoyo que yo he tenido para ser deportista y ser padre, que es una de las cosas más bonitas que me ha pasado”.
«El ciclismo se ha convertido en un deporte de élites y poco accesible para según qué familias»
Maté se formó en sus inicios en los equipos desaparecidos Ávila Rojas y Andalucía-Cajasur. Posteriormente, una década en Cofidis y, finalmente, el Euskaltel-Euskadi. “Mi primer contrato profesional lo firmé en Lucena, lo recuerdo perfectamente, con Antonio Cabello, que era el manager del equipo. Tengo unos recuerdos muy bonitos de aquella época, de mi primer año profesional, con muchísimos amigos, un ambiente espectacular…”, relata, aunque afirma con tristeza que, en la actualidad, el elitismo se ha adueñado del panorama ciclístico: “Por desgracia, se ha convertido en un deporte de élites y poco accesible para según qué familias, cuando precisamente ha sido todo lo contrario, el deporte del pueblo, de la gente humilde”. El ‘Lince Andaluz’ asegura que “los materiales son muy caros”, que “no hay apoyos de las instituciones públicas ni de las empresas privadas” y eso hace que sea “un deporte cada vez más elitista”. “Intentaremos pelear para que el ciclismo vuelva a ser el deporte del pueblo”, proclama en esta edición de ONCESOLES.
Marbella premia a Maté con la Medalla de la Ciudad: «Una alegría muy grande»
Por el mes de septiembre, el Ayuntamiento de Marbella anunció que entregaría la Medalla de la Ciudad al propio Luis Ángel Maté junto con el boxeador Ayoud Ghadfa y la extaekwondista Elena Benítez. Una noticia que pilló “entrenando” al ciclista: “Me dio una alegría muy grande. A todo el mundo le gusta que le reconozcan su trabajo, y mucho más aún si es en tu tierra y acompañado de grandísimos deportistas como voy a tener la ocasión. Encantado y muy orgulloso por ello. Disfrutaré del momento, no pensar demasiado en el futuro”. En parte, también por la disputa de hasta seis Tours de Francia: “Es el sueño de cualquier ciclista profesional. Un gran torneo. Son días que dan para mucho, con emociones buenas y que dan para todo. Son de los recuerdos más bonitos de mi carrera”.
Asimismo, aprovecha el espacio de ONCESOLES y AZ Costa del Sol para agradecer a toda la afición y esos marbellíes que le han parado por la calle para darle la enhorabuena por estar ahí, entre los mejores del mundo. “El reconocimiento de la gente a mi trayectoria y el cariño, eso es lo más bonito y me siento la persona más afortunada del mundo. Aquí, en Marbella, siempre he notado mucho el apoyo de la gente y espero yo haber devuelto ese cariño”. A comienzos de 2024 “ya sabía que, a nivel profesional,” le quedaba “poco tiempo en carretera”, y finalmente ha sido “un año muy emotivo y precioso”. “Ahora se abre otra página en mi vida, también muy bonita y espero que fructífera. Deseando empezarla, seguiré pedaleando y compitiendo en alguna otra disciplina”, agrega con optimismo y esbozando una amplia sonrisa.
«En varios momentos de mi carrera he tenido que acudir al psicólogo, es una herramienta imprescindible»
El boom mediático muchas veces nos muestra lo más bonito del ciclismo, los maillots amarillos, esos premios finales, el champán desparramándose entre los ganadores… Pero la realidad es bien distinta. En la otra cara de la moneda, los accidentes, el poco respeto a los ciclistas en las carreteras durante los días de entrenamientos. En definitiva, esas “caídas” de las que nos habla Maté: “Este es un deporte que tiene un riesgo intrínseco muy importante y te ves expuesto a situaciones duras que incluso ponen en peligro tu vida. He tenido la desgracia de perder también a varios compañeros en la carretera… Esa es la parte más dura de este deporte”. Por ello, es fundamental estar preparado mentalmente para ese reto que pueden ser kilómetros hasta la meta: “En varios momentos de mi carrera he tenido que acudir a profesionales de la psicología, es una herramienta muy importante, yo diría que imprescindible en el mundo del ciclismo de élite. Se ha progresado en muchas facetas y no podemos olvidar la psicológica, que, para mí, es la más importante de todas”.
“De pequeño me gustaban todos los deportes, como cualquier niño. Jugaba al fútbol, atletismo, ciclismo… Empecé en Estepona, en la Unión Ciclista Virgen del Carmen, donde hacían una labor extraordinaria con los niños, y allí fui dando mis primeros pasos. Ahora estoy arrimando el hombro para que los jóvenes tengan la oportunidad de montar en bici y aprender los valores tan bonitos de este deporte”, continúa Maté, que inició hace años junto a su familia la Academia Maté, posteriormente convertida en Iuvenis Cycling Academy. Realmente, no se ha subido al podio en demasiadas ocasiones. De hecho, solo cuatro en total: dos al inicio de su carrera (en la Vuelta a San Luis y la Route du Sud) y dos al final (ambas en la Volta a Portugal). Pero deja un consejo a los futuros ciclistas: “Que disfruten de lo que hacen. Cuando alguien disfruta y lo hace con motivación propia es cuando suelen salir las cosas bien. Que haga lo que les llena, la actividad que sea, pero que les guste”.