Veinte años llevan soñando los vecinos de la Costa del Sol con un cercanías que les lleve hasta Málaga. Uno que vaya más allá de Fuengirola, que conecte con Marbella, incluso más allá, que solucione de una vez por todas las colas, los atascos y frecuentes cuellos de botella que a menudo bloquean la carretera A-7.
La falta de suelo, el caro presupuesto -en torno a los 4 mil millones de euros- y la falta de acuerdo entre administraciones han apagado hasta ahora cualquier esperanza de ver el tren litoral hecho realidad. Sin embargo, un nuevo estudio, una nueva propuesta del consultor en movilidad urbana Lluis Sanvicens ha vuelto a agitar el avispero.
Su estudio, presentado el pasado septiembre, plantea extender el actual cercanías hasta Marbella, reducir la frecuencia de los trenes, recorrer los 61 kilómetros que separan Marbella de la capital en poco más de una hora. En una entrevista con AZ Costa del Sol cuenta todos los detalles del que podría ser el futuro tren litoral o futuro «metro de la Costa del Sol», como él lo llama. Una infraestructura que daría servicio a un millón de habitantes y resolvería un escollo histórico en la comarca.
«El estudio se basa en modelo Málaga-Fuengirola, un modelo de éxito», comienza a explicar Sanvicens. De hecho, su idea en un principio era ver cómo mejorar el trayecto de cercanías que ya existe, reducir su frecuencia -que ahora está en 20 minutos-, convertirlo en una especie de metro.
«La frecuencia que tiene no es la ideal, es así porque de los 31 km que tiene, doce son de vía única, analizando sección por sección, vi que era posible desdoblar la vía hasta 8 km vemos, así solo quedarían 4 km de vía única. Esto permitiría duplicar la frecuencia, reducirla hasta diez minutos, similar al metro».
Una vez hecho este análisis, el consultor se propuso seguir, se planteó la posibilidad de continuarlo hasta Marbella y pensó hacerlo por el aire, a través de un viaducto que corriese en paralelo a la carretera, la N340- A7.
«Vimos que era lo mas factible, un tren subterráneo tiene mas riesgos y eso se traduce en tiempo y presupuesto. Además por la N340 las bolsas de población están más alejadas, hay residencias pero no muy cerca o poco densas, espaciadas. Tomamos como ejemplo proyectos similares que ya existen como el metro de Doha, con una sección en viaducto bastante grande también», cuenta a AZ.
El viaducto elevado abarcaría un total de 25 km y se construiría sobre la mediana de la autovía a través de pilotes. Contemplaría desde Fuengirola un total de once nuevas paradas: cuatro en Mijas y siete en Marbella. El estudio propone el uso de túneles solamente en el acceso a los núcleos urbanos tanto en Fuengirola, como Marbella y la propia Málaga.
«En Fuengirola ahora el cercanías llega en viaducto y acaba soterrado en ultima estación, lo que haríamos sería mejorar el trazado y hacerlo todo subterráneo. Serían 3.2 km de túnel y cuatro estaciones. Más una antes y otra después elevadas, en total seis estaciones en Fuengirola. Luego, en Mijas intetaríamos ubicar cuatro estaciones elevadas. En Marbella habría tres estaciones elevadas en la zona suburbana, ya cuando en tren se acerca al arco de la ciudad empezaría el túnel hasta el pirulí y el Palacio de Congresos, ahí salen cuatro estaciones subterráneas mas, siete en total».
El trayecto total del tren litoral quedaría en un total de 61 kilómetros, con treinta estaciones, a recorrer en 62 minutos. «Estos tiempos podrían reducirse a 50 minutos con servicios exprés», describe el estudio que contiene una memoria, unos planos y un presupuesto, todavía más sorprendente: 1.700 millones de euros.
«He intentado dar números realistas tras estudiar lo que hay, las obras que hay que hacer. He tomado como referencia los precios de 2017 y les he incorporado un 20% de gastos imprevistos y un 15% de inflación. El proyecto -asegura Sanvicens- es factible y podría construirse por fases.
«La obra sería perfectamente compatible con mantener el tráfico en la carretera. No ha que cortar 25 km de golpe, se hace por tramos pequeños, puedes restringir carriles, dejarlos en uno en lugar de dos, trabajar por la noche, durante momentos del año menos lesivos. Se pueden ir haciendo las pilonas en medio de autovía y a los lados y luego para poner los tableros se puede hacer de noche cuando no hay tráfico. Es una obra asumible. Me aventuraría a decir que, dependiendo de cuántos tajos se hagan, podría estar hecho en un par de años».
Este consultor, que cuenta en su experiencia con experiencias en el Metro de Málaga, asegura que tras dar a conocer su estudio han contactado con él tanto ciudadanos de a pie interesados, como miembros de administraciones y partidos políticos, aunque de momento no habido ninguna reunión técnica formal. «Lo que necesita este estudio para salir es voluntad política para impulsarlo a nivel formal. A partir de ahí se haría un estudio informativo para la gente pueda hacer alegaciones, luego se harían los proyectos constructivos y ya vendría la obra. Es un proceso largo, pero cuanto antes se empiece mejor. Hay cosas que se pueden hacer ya de facto, como la mejora de la línea Málaga-Fuengirola. Otras como el viaducto o los túneles requieren mas tiempo de proceso administrativo».
La documentación está de momento sobre la mesa, como también lo estuvieron en su día otros bocetos parecidos que por una razones u otras nunca terminaron de salir. «Es una obra en la que tienes que poner de acuerdo a seis municipios, un gobierno autonómico y un gobierno estatal. Eso es muy complicado,no solo pasa aquí, pasa en otras ciudades, cuando hay diferentes administraciones ir todos a una no es fácil. Tener las cosas claras es complicado, ahora bien,, una vez que se consiga un consenso todo irá rápido», augura el consultor.