La empresa que gestiona el ciclo integral del agua en Marbella, Hidralia, ha logrado alcanzar durante el año 2021 un ahorro de 0,7 Hm3 del agua que se distribuye en el municipio.
O, lo que es lo mismo puesto en perspectiva, lo que consumen alrededor de 12.000 personas en un año. Un hito que ha sido posible, sobre todo, gracias a la microsectorización de la red y a su monitorización más inteligente y en tiempo real a través del Hub Operativo de DINAPSIS.
En total, la red de Marbella se divide en 85 sectores hidráulicos. Al tener la red completamente sectorizada, mediante los algoritmos implementados durante 2021, se pueden intensificar los trabajos de búsqueda de fugas en aquellos sectores donde se hayan observado los valores más distantes del caudal mínimo nocturno real, el consumo horario o en la cadencia analítica de mayor impacto para la mejora de- las pérdidas aparentes de agua.
Este hub operativo ofrece una suite de soluciones digitales para optimizar la gestión y mejorar el mantenimiento y la conservación de las infraestructuras.
No solo mediante la reducción de fugas, ahora además también a través del control de la calidad del agua, la telelectura y la gestión del trabajo a través de una planificación centralizada.
Esto posibilita la toma rápida de decisiones ante imprevistos y permite avanzar en el desarrollo sostenible de la ciudad y mejorar su resiliencia, al reaccionar ante crisis climáticas de manera inmediata y coordinada para reducir la afectación a la ciudadanía.
A ello se añade además la aplicación de técnicas innovadoras en la detección como la que permite detectar pérdidas más pequeñas a través de la inyección de helio en las tuberías, sin tener que interrumpir el suministro.
Estas buenas cifras ahorro registradas durante el año 2021 suponen que en los últimos cinco años, desde el año 2017, Hidralia haya logrado un ahorro de 1,13 Hm3 de agua anuales, gracias a la mejora de la eficiencia de la red de abastecimiento.
Pero el aprovechamiento sostenible de los recursos y la lucha contra el cambio climático no sólo pasa por el ahorro de agua, sino que se combina con una estrategia global donde se busca un aprovechamiento sostenible de todos los recursos naturales y el mínimo impacto ambiental, especialmente en períodos de sequía como el que estamos viviendo actualmente.
En este sentido, destacan dos proyectos como es la recarga de acuíferos que se realiza cada año. El objetivo es mejorar la calidad y cantidad de agua de un acuífero profundo costero rellenándolo con el agua excedentaria de otro acuífero cercano más superficial después de la lluvia evitando que, en caso contrario, se vaya al mar. Así, se aprovecha su capacidad de almacenamiento para su explotación en caso de necesidad.
El otro proyecto ha permitido a través del conocimiento del acuífero, sus valores de entrada de agua y salida del mismo, optimizando de forma transparente y de la mano de universidad de Málaga, los límites de extracción de cada sondeo, así como conocer mediante la digitalización los momentos en donde, a consecuencia de las lluvias, se permite comenzar a extraer agua siempre de forma sostenible.