Charo llamó a su centro de salud en Marbella el 25 de mayo. Llevaba tiempo con fuertes dolores de estómago, estaba asustada debido al historial médico familiar -su madre había fallecido recientemente de cáncer de colón- y por eso le pidió a su médica una cita para una analítica completa. La respuesta fue contundente: «Eso va a tardar tres meses cómo mínimo», le dijo su doctora pero Charo, estupefacta, no se lo terminó de creer.
«Yo me quedé de piedra, pero pensé… no será tanto», explica hoy a AZ Costa del Sol. Sin embargo, para su desgracia, la médica tenía razón. Hasta el pasado 3 de septiembre no le dieron finalmente cita para someterse a la prueba diagnóstica, tres meses y medio después.
«Es una verguenza que haya esa lista de espera símplemente para una analítica, nos tienen abandonados«, denuncia hoy Charo indignada por unos retrasos que le obligaron durante ese tiempo de espera a recurrir a la sanidad privada para conseguir la analítica.
«Como yo seguía con dolor tuve que ir a lo privado. En el analisis me salió que tengo sangre oculta. Ahora yo no sé si tengo una úlcera en el estómago o algo peor. He pedido a mi médica del centro de salud que me manden al digestivo pero si la analítica ha tardado tres meses y medio… ¡imagínate el especialista!», denuncia Charo.
El Sindicato Médico Andaluz ya advirtió este verano de la dramática situación asistencial de los centros de Atención Primaria con las largas listas de espera para conseguir cita. Según el sindicato, la media de espera para conseguir una primera cita ronda entre siete y diez días, llegando a picos de 15 días. Además -aseguran- «el 45-50 por ciento de media de las consultas han sido cerradas en estos meses por vacaciones y sin sustitutos».