Un equipo del Departamento de Química Analítica de la Universidad de Cádiz ha implementado un innovador método ecológico de extracción por ultrasonidos para identificar y cuantificar el triptófano en setas silvestres. Los ensayos, realizados con hongos comestibles recolectados en el sur de Andalucía y el norte de Marruecos, revelaron que las setas del género Lactarius y Boletus contienen las mayores concentraciones de este aminoácido esencial. La investigación, publicada en la revista Food Chemistry, destaca el uso de etanol como disolvente, en lugar de los tradicionales disolventes orgánicos, alineándose con las normativas de química verde y sostenibilidad.
Para llevar a cabo el estudio, los investigadores limpiaron y congelaron las setas durante 48 horas para eliminar la humedad, y luego utilizaron un proceso de liofilización seguido de extracción por ultrasonidos. Alejandro R. López, autor principal del estudio, explicó que se buscaban los niveles óptimos de temperatura para maximizar la extracción de triptófano. Posteriormente, se cuantificó la concentración de este aminoácido utilizando técnicas de cromatografía líquida, confirmando que las setas no solo son ricas en agua, minerales y vitaminas, sino que también son una fuente significativa de triptófano, precursor de la serotonina y melatonina.
Además de sus propiedades nutricionales, los investigadores evaluaron los beneficios para la salud de estos extractos, analizando su capacidad antioxidante y su potencial en terapias para enfermedades neurodegenerativas. Los extractos del género Lactarius mostraron promesas como suplemento dietético para personas con Alzheimer o en riesgo de desarrollarlo. Para validar estos hallazgos, se proponen estudios adicionales in vitro y en modelos animales, en colaboración con diversas instituciones de investigación.