Romper la dinámica negativa de tres derrotas consecutivas, encontrar un juego fluido en ataque y mejorar en defensa. Esos son los objetivos a corto plazo para el equipo entrenado por Pablo Bernabé, que en apenas 11 días tiene que afrontar cuatro partidos y debe volver a la senda de la victoria para seguir pensando en la parte alta de la tabla clasificatoria.
El rival es uno de los favoritos para estar, al menos, en la final four por el ascenso, pero también es un equipo que no sabe lo que es vencer al cuadro esteponero, pues la pasada campaña perdieron 74-76 en Badalona y 88-44 en el Pineda. Pero precisamente porque el pasado solo es eso, y no asegura nada en el futuro, el pensamiento está puesto en que la Penya no deja de ser uno de los equipos que mejor se ha reforzado este verano y que cuenta con una jugadora diferencial en la categoría como es la alero catalana Gala Mestres.
Bernabé podrá contar con toda la plantilla después de haber podido trabajar y recuperar en el apartado físico durante más de una semana.
“El objetivo es recuperar el buen juego, en primer lugar, competir el partido y luego ver si tenemos opciones de ganarlo”. Así de certero se mostró el técnico maleno en declaraciones previas al viaje a la ciudad Condal, dejando claro que lo importante en este momento es centrarse en el trabajo del grupo para llegar al punto deseado más que centrarse en el rival, si bien es cierto que el estudio del Joventut de Badalona está más que realizado de cara al encuentro: “Somos conscientes de que son uno de los rivales más complicados de la liga, están arriba por méritos propios y especialmente en su casa no será sencillo”. Y que, como aseguraba Bernabé, la Penya “es un equipo muy bien trabajado defensivamente”, con características habituales de los conjuntos entrenados por Jordi Vizcaíno y la escuela catalana. “Se trata de una plantilla muy completa”, apuntaba el técnico del CAB Estepona Jardín de la Costa del Sol, que más allá de hacer un repaso del plantel verdinegro destacaba a Gala Mestres, “su clara referente” y segunda máxima anotadora de la competición.
Un quinteto de grandes nombres y una defensa sobresaliente
Hablar del Joventut de Badalona sobre el papel es fijarse en nombres como los de Gala Mestres (segunda máxima anotadora de la liga con 18,25 puntos de media), Lex Johnson (máxima anotadora la pasada campaña en LF2 y una jugadora con gran capacidad reboteadora), Marita Davydova o Dominique Toussaint, sin olvidar a la internacional polaca Aleksandra Parzenska. Sin embargo, la fortaleza del cuadro catalán no llega de sus individualidades en ataque, pues el juego de su entrenador, Jordi Vizcaíno, da mucha libertad y capacidad para destacar en ese apartado, sino en el trabajo defensivo donde destacan jugadoras con menos nombre.
Vizcaíno ha sabido completar el plantel con jugadoras como Alba Orois, que antes de marcharse a estudiar a Estados Unidos tenía minutos en Liga Femenina con Sant Adrià o Marina Aviñoa, procedente de Basket Almeda, que además de sumar dirección de juego tiene la defensa en el ADN para crecer y construir a partir de ella.
Así, la propuesta de juego vistoso en ataque (promedian 69,3 puntos por partidos, solo superadas por Recoletas Zamora) se cimienta en un buen trabajo en el rebote (nadie captura más rechaces por partido en la liga) y la citada defensa, pues tan solo encajan 59,5 puntos por partido, una cifra que solo mejoran Baxi Ferrol y el cuadro zamorano, que actualmente ocupan el primer y segundo lugar, con quien la Penya empataría en caso de victoria que el CAB Estepona Jardín de la Costa del Sol buscará evitar.