El Ayuntamiento de Torremolinos (Málaga) ha iniciado un plan de embellecimiento de diez islas ecológicas repartidas por diferentes puntos de la localidad que contarán con vinilos informativos y decorativos.
Este proyecto estético y divulgativo ha comenzado con la isla ecológica situada en la plaza Federico García Lorca y de forma progresiva se irá desarrollando en los otros nueve puntos elegidos para llevar a cabo esta iniciativa.
La alcaldesa, Margarita del Cid, junto con la concejala de Litosa, Avelina González, han visitado esta primera zona en la que se han implantado los nuevos vinilos que cuentan con información detallada de los residuos que se deben depositar en cada buzón además de una imagen de diferentes enclaves emblemáticos o singulares de Torremolinos.
Además de en la plaza Federico García Lorca, este plan de embellecimiento se llevará a cabo de forma progresiva en las islas ecológicas situadas en la calle Jamaica, avenida Isabel Manoja con Avenida Europa, calle Río Bergantes con avenida Los Manantiales, paseo marítimo junto al hotel Meliá Costa del Sol, paseo marítimo junto al chiringuito Tiki, paseo marítimo de Costa Lago, plaza del Remo, calle Danza Invisible, junto al cementerio y calle Casablanca.
Además de la mejora de la imagen y la estética en superficie de estos puntos también se instalarán como proyecto piloto los nuevos contenedores marrones en estas diez islas ecológicas por lo que en estos enclaves ya se podrá proceder al reciclaje de los residuos orgánicos.
Esta acción llega después de la colocación de estos nuevos contenedores en toda la planta hotelera del municipio, donde el 70% de todos los residuos que se recogen son orgánicos.
La implantación de estos contenedores marrones se hará de forma gradual en el resto de la ciudad, acompañada de una campaña de concienciación e información para que los vecinos de Torremolinos conozcan con claridad el uso correcto de este nuevo contenedor para el reciclaje de los residuos orgánicos.
En el contenedor marrón debe arrojarse todo aquello que sea orgánico, es decir, carne, pescado, cáscaras de huevo, frutas, verduras, flores, o restos de café. En el tradicional contenedor gris se deberá seguir tirando excrementos animales, pañales, compresas, colillas o toallitas.