«No tiene sentido que en pleno agosto el Hospital de Estepona cierre sus consultas externas»

Hartos de la impotencia, de la resignación, de que los problemas de la sanidad pública no fueran más allá de una charla de bar o una sobremesa, un grupo de pacientes de la Costa del Sol ha decidido dar el paso y constituir una asociación -La Asociación de Pacientes de la Costa del Sol- con el objetivo de mejorar la calidad de este servicio público, pero sobre todo de hacerse escuchar.

Antonio Moro, su presidente, es vecino de Estepona y paciente crónico. Por tanto, habituado a vivir en carne propia las deficiencias del sistema. «A partir de mi situación personal hablaba con otros pacientes, con profesionales, con familias y me di cuenta de que los pacientes no somos considerados,  que en la toma de decisiones no se tiene  en cuenta la visión del paciente», explica a AZ Costa del Sol.

Por eso, unido a una treintena de personas entre pacientes y familiares, decidieron montar esta asociación que pretende ser ante todo constructiva. «Estar todos los días criticando a la sanidad publica es un error porque gracias a la sanidad publica yo estoy vivo. Eso lo único que hace es alimentar que crezca la sanidad privada y lo que debemos hacer es apoyar y trabajar para que la sanidad publica tenga mayor calidad».

No quieren ser destructivos, dicen, pero sí están dispuestos a señalar sin titubeos los errores o problemas y trasladarlos a la administración. Problemas como la falta de transparencia, las listas de espera, la brecha digital o la falta de servicios. «No tiene sentido que en pleno agosto el Hospital de Estepona cierre sus consultas externas -cuenta Antonio-. Debería ser al revés, deberían potenciar los servicios sanitarios ahora que la población aumenta. Dicen que cierran por falta de personal, pero eso no es verdad. No hay profesionales porque no hay contratos de larga duración con sueldos dignos. El problema no es que falten profesionales, es que a los profesionales no se les ofrecen cosas mínimamente dignas. A la administración hay que decirle que esas cosas son solucionables».

De momento la asociación ya cuenta con estatutos y página web. Su siguiente paso será presentarse a los gerentes de los hospitales, los responsables de los distritos sanitarios,  el Colegio de Médicos, los sindicatos. «Queremos que sepan que existimos, que podemos apoyarnos. Que nos vean como interlocutores», insiste Mora,  «ahora tenemos un altavoz y con la ayuda de los medios de comunicación y las redes, haciendo uso del sentido común, conseguiremos que por lo menos nos oigan».