Nuevo giro del Ayuntamiento de Málaga en relación a las viviendas turísticas. La nueva modificación del Plan General (PGOU) impedirá que se implanten nuevos alojamientos de este tipo hasta en 43 barrios de la ciudad, la mayoría de ellos, en el Centro Histórico, donde se supera un 8% de viviendas turísticas respecto al parque de vivienda residencial. En otros 328 barrios, solo podrán darse de alta aquellas viviendas turísticas que tengan entrada y servicios independientes.
El resto de barrios (46) hasta 417 no son considerados barrios residenciales. Así lo ha explicado la concejala delegada de Urbanismo, Carmen Casero, que ha detallado que la junta de gobierno local aprobará de forma inicial esta modificación que tendrá que ser, a su vez, validada por el Pleno y publicada en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), tras lo cual, entrará en vigor.
Esta nueva modificación se centra en incluir una disposición adicional, de acuerdo a lo establecido en el decreto 31/2024 de la Junta y que habilita a los ayuntamientos a establecer limitaciones de viviendas turísticas por razón de interés general.
Así, se basará en la limitación de este tipo de viviendas en barrios donde ya existe un gran número y donde supone un detrimento del parque residencial de acuerdo al estudio sobre el impacto de la vivienda turística en la ciudad elaborado por Espacio Común Coop, que aporta datos hasta junio del presente año.
ESTUDIO SOBRE EL IMPACTO DE LA VIVIENDA TURÍSTICA
En el estudio se ha analizado la incidencia que la vivienda de uso turístico tiene en 417 barrios de la ciudad, atendiendo al número de viviendas de este tipo que están inscritas en el Registro de Turismo de Andalucía –11.559, de las que operan a través de plataformas 7.035–. Así, arroja entre sus conclusiones que las viviendas de uso turístico (VUT) suponen casi el 75% de las plazas de alojamiento turístico ofertadas y se concentran en cuatro distritos de la ciudad, siendo los barrios del Distrito Centro los que acumulan un 65% de las mismas.
También que entre los años 2016 y 2024 las VUT se han incrementado sobre todo en aquellos ámbitos analizados que presentan mayor presión turística residencial; que las viviendas de uso turístico tienen una rentabilidad económica sensiblemente superior que el alquiler convencional; que los barrios con mayor presión turística residencial pierden mayor número de personas y hogares o crecen en menor número de estos; y que los precios de alquiler son más altos en los barrios que soportan una mayor presencia de VUT.