El delegado territorial de Turismo, Cultura y Deporte, Carlos García Giménez, ha presentado a las distintas asociaciones que conforman el sector del turismo en la provincia de Málaga la nueva Ley de Turismo Sostenible de Andalucía, cuyo trámite fue iniciado el pasado 18 de febrero por el Gobierno andaluz.
A la reunión han asistido representantes de Aechos, Aedav, CIT-Marbella, APIT, Guidesur, Faeplayas, Atumarcos, AVVA-Pro y Apeco, estando representados por tanto los sectores hotelero, agencias de viajes, guías turísticos, playas, apartamentos turísticos, viviendas de uso turístico y actividades de ocio.
Tras destacar el liderazgo de la provincia malagueña en materia turística, Carlos García ha señalado que el objetivo de la nueva Ley «es la ordenación, planificación y promoción del turismo en el marco del principio de sostenibilidad ambiental, económica y social, así como la definición de los principios de la política turística».
Así, la nueva normativa permitirá «afrontar adecuadamente los retos a los que se enfrenta la industria turística», garantizando las condiciones necesarias para reforzar el posicionamiento de Málaga y Andalucía como destinos de referencia.
«Andalucía va a dejar atrás una norma con 12 años de antigüedad para poner en marcha una nueva Ley que es futuro, innovación, digitalización y que introduce por primera vez el concepto de política turística», ha explicado el delegado, quien ha indicado que el Gobierno andaluz «tiene un firme compromiso con el presente y el futuro del turismo como principal motor económico de Málaga y de nuestra comunidad».
En este sentido, ha asegurado que la Ley fomentará la colaboración entre administraciones y empresas, introduciendo fórmulas de cogobernanza turística, además de crear el Observatorio para la Sostenibilidad Turística Local, en el que colaborarán las entidades locales andaluzas a través de la FAMP, las empresas del sector a través de la CEA y la Junta de Andalucía a través de la Consejería de Turismo.
«Para nosotros el turismo es un sector clave, por lo que era necesaria una nueva Ley que garantizara el futuro de la industria, y que se hiciera de la mano de los agentes sociales implicados y de todas las administraciones. Solo así podremos seguir siendo un destino de referencia mundial, desde la sostenibilidad y la competitividad», ha añadido el delegado.
También ha defendido «un modelo turístico sostenible y de calidad, que genere empleo estable, que defienda a los usuarios de los servicios turísticos y, además, facilite y promueva la formación y cualificación de los profesionales del sector».