El paso de la borrasca Berenice ha dejado importantes lluvias en estos días en la Costa del Sol. El momento de máxima intensidad fue la pasada noche del lunes donde la provincia recibió hasta 100 l/m2 de agua. Cifras que pueden generan una falsa esperanza y creer que la situación de sequía que atraviesa la comarca está cerca de su final. Los embalses de la provincia siguen necesitando más agua.
Según los últimos datos del portal Hidrosur -consultados por AZ este 15 de octubre- el embalse de la Concepción se encuentra aún al 40,11% de su capacidad, con un volumen actual de 23,08 hectómetros cúbicos. No obstante, el pantano ha conseguido ganar algo más de un hectómetro cúbico tras las lluvias de las últimas horas. En el día de ayer, lunes 14 de octubre, el embalse se encontraba al 39% de su aforo con apenas 22.7 hectómetros cúbicos.
Echando la vista atrás, las cifras son poco esperanzadoras. A finales de marzo de este 2024, este mismo embalse que abastece a toda la Costa del Sol se encontraba al 49,24%, alcanzando un volumen de 28.33 hectómetros. Una situación que mejoró gracias a las lluvias y borrascas que pasaron a finales de ese mismo mes por la comarca.
No obstante, la provincia permanece en alerta amarilla hasta el mediodía de este martes, por lo que se espera que las tormentas mejoren el estado de las siete presas de la provincia a lo largo de la semana.
En el resto de embalses, la situación es similar al de Istán. El de La Viñuela -a fecha de este martes 15 de octubre- se encuentra al 13,62% con un volumen de 22,38 hectómetros cúbicos. En estas últimas 24 horas, el embalse ha superado solo superar casi un 0,1% de su capacidad.
No obstante, según revela La Opinión, los técnicos de las dos mancomunidades del litoral se muestran esperanzados con que, después de un verano muy seco, estas precipitaciones hayan abonado el terreno para que los nuevos chubascos previstos hasta el jueves logren invertir la curva de los pantanos.