El Ayuntamiento va a instalar en los próximos días 47 purificadores de aire en las instalaciones de los tres núcleos del municipio destinadas a talleres. Una medida enmarcada en el Plan de Contingencia de los Talleres Municipales y que ha supuesto una inversión municipal de 6.000 euros.
El objetivo es crear espacios de mayor seguridad, sobre todo, de cara a la entrada de la temporada de frío, en que la ventilación natural es más complicada. Al igual que el consistorio hizo el pasado curso en los centros educativos del municipio, en cuyas aulas se instalaron casi un centenar de estos aparatos.
Los purificadores de aire son unos sistemas de climatización y ventilación de interiores recomendados por el Ministerio de Sanidad para edificios públicos. Sirven para luchar contra los contagios por aerosoles y reducir también los ácaros, gérmenes y moho, por lo que son una alternativa para prevenir la propagación del COVID-19 en locales de uso público, cuando mantener las ventanas abiertas no sea posible por las condiciones climatológicas, ya que eliminan las partículas en suspensión que pueden contener el virus.