El alcalde de Benalmádena, Juan Antonio Lara, junto al edil, José Luis Bergillos, ha avanzado este jueves los detalles del estudio en el que han estado trabajando durante meses los técnicos de las áreas de Urbanismo y Vivienda para identificar las zonas más tensionadas de viviendas turísticas en la ciudad, y que se concentran en la zona de costa, a la vez que suponen un 15,23% de las viviendas en la localidad
«Ahora el municipio ya cuenta con un plano pormenorizado que demuestra que zonas como Arroyo de la Miel o el Pueblo tienen densidad de viviendas vacacionales que no superan el 10 y el 5%, mientras que el Puerto Deportivo y la Costa, en especial el complejo Benalbeach, poseen una mayor concentración», ha avanzado Lara.
Tanto Urbanismo como Vivienda, con los concejales Presi Aguilera y José Luis Bergillos al frente respectivamente, llevan desde el inicio de legislatura analizando la situación en una apuesta del equipo de gobierno por realizar un plano de saturación de viviendas turísticas.
Desde el Ayuntamiento destacan que para elaborar este plano se ha comparado el número de viviendas inscritas en el Registro de la Junta de Andalucía con el número de viviendas total existentes en cada una las unidades de ejecución del planeamiento urbanístico de Benalmádena.
En el mapa pormenorizado se observa que Benalmádena tiene un total de 49.500 viviendas, de las cuales, 7.542 tienen finalidad turística. «Hemos detectado que la mayor de concentración de viviendas turísticas se encuentra en Benalmádena Costa, en concreto en el Puerto Deportivo, y en la unidad de ejecución de Benalbeach, además de algunos edificios en avenida Gamonal, todos ellos diseñados para corta temporada, turismo residencial y vacacional», apostilla el edil de Vivienda.
«Los núcleos de Arroyo de la Miel y Benalmádena Pueblo tienen densidad de viviendas con uso vacacionales inferiores al 10%, e incluso al 5% en algunas zonas», añade.
Ahora, el compromiso del gobierno local pasa por estudiar estos datos pormenorizados y compararlos con otras ciudades similares para ver el nivel de tensión real de estas viviendas. Para ello, Benalmádena irá de la mano de la Universidad de Málaga (UMA) para establecer las limitaciones que se vayan a aprobar en cada una de las zonas ya estudiadas.
«La Universidad nos ofrece la posibilidad también de identificar a través de herramientas informáticas, las viviendas ilegales, además de identificar las durmientes, aquellas que están en el registro pero no están operativas en las plataformas. Esto nos permite tener localizadas también aquellas viviendas que se dan de alta en el Ayuntamiento, pero realmente no están activas ni en el mercado», concreta Bergillos.
Por otro lado, muchos de estos datos también se están cotejando con otras áreas como Seguridad Ciudadana, «porque a través de la Policía Local podemos cotejar todo correctamente y ver los efectos de estas viviendas sobre otras áreas municipales como la recogida de residuos, papel, cartón y plástico, problemas de seguridad, molestias a vecinos y comunidades o el consumo de agua, entre otros».
«Estamos ultimando todos los datos y la propuesta de actuación se llevará al Consejo Sectorial de Vivienda, que se convocará en breve», avanza Bergillos, porque «el objetivo que persigue este gobierno municipal siempre es el de trabajar con los datos pormenorizados para que las decisiones se ajusten a la realidad ante problemas que no son fáciles de regular», concluye.