Hidralia, empresa medioambiental andaluza de gestión del ciclo integral del agua, es consciente de la importancia de encontrar nuevas fórmulas para enfrentar los nuevos retos de los recursos más básicos del planeta, el agua y la energía, debido al incremento de la demanda y el agotamiento de las fuentes. Es por ello que patrocina el Primer Foro Binomio Agua y Energía que se desarrolla en el Museo Arqueológico de Almería y que organizan las universidades de Granada, Barcelona y Almería.
Una iniciativa con la que se pretende analizar algunas claves de las sinergias entre ambas materias, ofrecer una perspectiva sobre su regulación y mostrar iniciativas que permiten avanzar hacia la sostenibilidad.
Un espacio que ha sido aprovechado por Hidralia para exponer la importancia de una de sus grandes apuestas: el cambio de modelo de las Estaciones de Depuración de Agua (EDARs) a las denominadas ‘Ecofactorías’.
En una ponencia realizada por Ernesto Sánchez, director de Innovación de Hidralia y miembro del patronato de Cetaqua (Centro Tecnológico del Agua), y Jorge Palomino, director Jurídico de la compañía, se explicó como hasta ahora la función de estas plantas de tratamiento era la de recoger el agua residual de una población para, a través de una serie de procesos, volver a verterla al medio en las mejores condiciones posibles. Sin embargo, desde Hidralia se ha cambiado su filosofía para considerar estas instalaciones como una ‘fábrica’ de recursos que regenera el agua para nuevos usos (riego, agrícola e industrial), que valoriza todos los residuos (por ejemplo, generación de biogás a partir de los lodos resultantes de la depuración), y, por último, produce energía para su propio abastecimiento, generando un impacto positivo en su entorno.
Es lo que desde la compañía se denomina ‘Ecofactoría’ y de esta forma se realizó un análisis de la metodología de transformación de una instalación a esta nueva forma de entender el proceso de depuración de aguas, que se convierte en uno de los máximos exponentes de la economía circular.
Pasando por su aproximación jurídica, parándose en las normativas, directrices, diferentes informes, reglamentos de la depuración del agua y la defensa de los ecosistemas hídricos (como los nuevos objetivos marcados a través del pacto Verde Europeo y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU), así como ejemplos de experiencia de éxito.
Entre ellos resalta la conocida como Ecofactoría Bio Sur de Granada, que está ya consagrada y cuenta con varios reconocimientos sobre su gestión, cuyo modelo sirve de guía para extrapolar la experiencia a otros territorios. Es el caso de la depuradora de Roquetas, que gestiona Hidralia, y que ha dado un paso muy significativo hacia este nuevo paradigma con las obras del terciario.
Una actuación que permitirá al equipamiento contar con las instalaciones necesarias para ofrecer un efluente (agua residual tratada) de calidad para que el 100% del agua regenerada en la planta pueda ser aprovechada para el riego de invernaderos. Lo que convierte a la actuación en una palanca de impulso no solo de la economía circular, sino también de minimización del impacto de periodos de sequía al evitar que se tenga que extraer este recurso del acuífero y/o la desaladora. De hecho, se conseguirá que los 8,3 hm3, que de media que se tratan ahora, se puedan aprovechar al 100% (hasta llegar a un máximo de 11,3 hm3) para su uso agrícola.