La consejera de Fomento, Marifrán Carazo, y la alcaldesa de Marbella, María Ángeles Muñoz, han firmado un convenio de colaboración para iniciar obras de mejora en la carretera de Marbella a Istán (A-7176), concretamente en un tramo de 1,9 kilómetros comprendido entre la intersección a la antigua carretera nacional N-340 hasta el cruce con la autovía del Mediterráneo (A-7).
Con la firma de este acuerdo, se inicia la tramitación de las obras de la carretera, que tendrán una inversión de 4,9 millones de euros, financiado en un 60% por la Administración autonómica y un 40% por el Consistorio.
“Hemos trabajado en un clima de estrecha colaboración para actuar de manera integral en una carretera que debía adaptarse a su nueva realidad urbana, con más acerados, arcenes e iluminación, además de cruces más seguros”, ha manifestado Marifrán Carazo.
Tras la firma de este convenio, comienza el proceso de licitación para que las obras puedan comenzar a lo largo del primer trimestre de 2022 con un plazo de ejecución estimado de doce meses.
El tramo donde se va a trabajar cuenta con un volumen de tráfico de 2.000 vehículos diarios, de los que un
11% son pesados. Aunque colinda con varias urbanizaciones, carece de aceras e iluminación, por lo que entraña una gran peligrosidad para los vecinos. Sus márgenes, por tanto, no están adecuadas a la cercanía con las viviendas, que generan muchos desplazamientos a pie y en bicicleta.
El proyecto incluye arcenes de 1,5 metros de anchura en ambos márgenes, la rectificación de su perfil longitudinal y la construcción de cuatro glorietas que regulen la circulación, reduzcan la velocidad y mejoren la seguridad vial en los cruces existentes. Asimismo, se prevé la construcción de acerados perimetrales en ambos
márgenes de 2,5 metros de anchura.
De igual forma, se han proyectado obras de drenaje transversal para la mejora del funcionamiento hidráulico y una serie de cunetas en los márgenes al pie de los desmontes, para evitar la llegada del agua a los acerados.
El proyecto se completa con una instalación de alumbrado público, energía eléctrica subterránea bajo acerado y una red de riego y jardinería. También se dispondrá de nuevo arbolado con la plantación de palmeras en el recorrido. Por último, se incorporará nueva señalización horizontal y vertical, así como dispositivos de balizamiento y nuevas medidas de protección.