Los municipios de la Costa del Sol, del Valle del Guadalhorce y de la Serranía de Ronda dejan atrás el aviso naranja de la Agencia Estatal de Meteorología, aunque eso no quiere decir que no vaya a llover este fin de semana. Lo más positivo es que los daños han sido muy leves tras las fuertes lluvias, granizos y tormentas de este viernes.
«Quedó desactivado el Plan Municipal de Emergencia después de que la #AEMET haya dejado sin efecto el aviso naranja que ha estado en vigor desde las 9:00 hasta las 23:59 horas del viernes», informaba desde temprano el Ayuntamiento de Benalmádena, que apunta que, «afortunadamente, las precipitaciones no han causado problemas de entidad».
Desde Manilva hasta Torremolinos se reforzaron las dotaciones de Bomberos, Policía Local y Servicios Operativos que, junto a Protección Civil, han trabajado coordinados para abordar las incidencias que se han presentado. En el caso de Benalmádena, «ninguna de especial gravedad».
No obstante, desde el Ayuntamiento de Torremolinos han pedido «extrema precaución» por la alerta amarilla activada debido a «fenómenos costeros que afectan a la ciudad por viento del este y nordeste de 50 a 60 km/h (fuerza 7) con olas de 2 a 3 metros».