Científicos de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) y la Universidad de Málaga han desarrollado un innovador hidrogel biodegradable que funciona como un vendaje natural para frutas. Este material, aplicado en las áreas dañadas, crea una capa protectora que bloquea la entrada de patógenos y disminuye la pérdida de humedad, dos factores clave en el deterioro de frutas con heridas.
El tratamiento, concebido para proteger de forma sostenible las frutas lesionadas, promete ser una solución eficaz para reducir el desperdicio alimentario, un desafío global de gran relevancia.
El hidrogel ha sido creado a partir de componentes naturales como el quitosano, un polímero obtenido de la quitina, y extractos de plantas con cualidades antimicrobianas.
Estas características no solo hacen que sea un tratamiento eficaz para la conservación de frutas, sino también una alternativa ecológica que responde a las crecientes exigencias de sostenibilidad en el sector alimentario.