Borja Iglesias ha vivido uno de los momentos más emotivos de su carrera durante su presentación como nuevo jugador del Celta de Vigo. En medio de la celebración, el delantero se ha visto sorprendido por la aparición de su abuela Teresa, lo que ha generado mucho emoción en el campo de A Madroa. “Cuánto sufrí cuando se fue”, expresó Teresa, reflejando el dolor que sintió cuando su nieto dejó Galicia.
Cuando Teresa apareció en el césped, el futbolista, visiblemente emocionado, se echó las manos a la cara y se fundió en un largo y cariñoso abrazo con ella. “Es una sorpresa bonita”, dijo el futbolista entre risas y lágrimas, mientras seguía abrazando y besando a su abuela.
El futbolista, quien había dejado el Celta en 2017, no pudo contener su alegría por volver al club que considera su hogar. “Hace unos años tuve que salir y durante todo este tiempo, siempre pensé si tendría la oportunidad de volver. Para mí hoy es un momento muy especial”, ha agradecido el delantero.