El Sindicato Médico de Málaga ha criticado el abandono de las urgencias extrahospitalarias en la época estival. Así, aseguran que las salas de cordinación 061, que «ya se encontraban saturadas», sufren en verano un incremento importante de su actividad, lo que supone un «alto riesgo» para la salud de toda la población.
Para ello, el sindicato se basa en los datos oficiales de 2023 aportados por la Diputación de Málaga donde se indica el aumento del primer cuatrimestre de 2924 de un 8,1% de visitas turísticas. Un crecimiento que aseguran «aumentar la demanda sanitaria de urgencias y emergencias» al mismo tiempo que «no existe un aumento reglado y previsible de médicos coordinadores que la puedan atender», según ha indicado el sindicato en un comunicado.
La situación se agrava en la llegada de cada verano. Así, aseguran que el recién estrenado verano se presenta en la capital malagueña con un panorama «preocupante» y «desolador». La razón, según indican, «la imposibilidad de cubrir los puestos médicos del Servicio de Urgencias de Atención Primaria en ambulancias y puntos de urgencias».
Algo que no difiere en el resto de la provincia. En concreto, en el Distrito Sanitario Costa del Sol -en San Pedro Alcántara- aunque «cuentan desde principios de año con una UVI móvil más, no ha aumentado la plantilla médica» y «no es razonable que el mismo número de profesionales atienda la alta demanda de la época estival, además de la insuficiente plantilla médica que existe en todos los SUAP del distrito durante todo el año», critican.
No obstante, el sindicato malagueño asegura que atendiendo a las demandas del Sindicato Médico Andaluz (SMA) de aumentar el número de médicos coordinadores, la dirección del 061 argumenta que estudiará los aumentos porcentuales de llamadas que se vayan produciendo a medida que avance el verano y sólo en el caso de un incremento del 25% valorarán la posibilidad de ampliar la plantilla con dos refuerzos en turno de día para toda Andalucía.
Desde el sindicato se recuerda la «imposibilidad» de que los servicios de urgencias «puedan absorber ni una mínima parte de los pacientes al estar ya saturados» y «con una sobrecarga brutal en periodo no vacacional».