Tras escuchar las quejas de los vecinos del Coto por la construcción de una nueva gasolinera en la zona, el Ayuntamiento de Mijas anunció ayer que ha solicitado a la empresa la suspensión temporal de las obras.
Al parecer, de toda la documentación requerida para construir estas instalaciones faltaría el estudio del impacto para la salud. Razón por la cual la propia alcaldesa, Ana Mata, explicó que se ha dado un aviso a la empresa para que en corto plazo «suspenda las obras de forma voluntaria y no continúe con las mismas en tanto en cuanto no aporten ese estudio que deben solicitar a la Delegación de Salud».
Desde el Ayuntamiento recuerdan que la licencia de obra para construir la gasolinera fue otorgada por el equipo de gobierno anterior y aseguran que de no producirse la suspensión voluntaria revisarán «de oficio la licencia» por no ajustarse a la legalidad.
Unidos bajo la plataforma «Stop Gasolinera el Coto», decenas de vecinos de la zona se han propuesto paralizar la futura gasolinera cuyas obras ya están en marcha. El problema de su instalación en la avenida de Mijas, entre los números 45 y 47, es -según los vecinos- el impacto ambiental que traerá consigo, ya que ésta ocupará una zona de servidumbre junto al cauce de un arroyo, además de otros perjuicios como ruido u olores.