En su estrategia para prevenir los efectos más dramáticos de la sequía, la empresa pública de aguas Acosol está estudiando la posibilidad de dar un paso más a la hora de involucrar a la población, sobre todo, a aquellos que a día de hoy siguen haciendo mal uso de este bien tan escaso.
En la última reunión con las operadoras que suministran agua en baja en la Costa del Sol fue uno de los puntos centrales: decidir cómo informar o notificar directamente a los consumidores cuando se detecte un «uso excesivo de agua».
Según ha explicado este organismo a AZ Costa del Sol, aunque la idea es todavía incipiente y aún se tiene que estudiar el modo en que se aplica, seguramente acabe por llevarse a cabo «como primera medida para que el usuario conozca que no está haciendo un buen uso, por si lo desconocía».
Se trata de dar un toque de atención a la ciudadanía para ayudar a cumplir el objetivo impuesto por la Junta de Andalucía para toda la Costa del Sol de reducir en un 20% el consumo de agua.
Además, el hecho de identificar esos puntos más «derrochadores» permitiría detectar si en ellos se están incumpliendo algunas de las medidas de ahorro establecidas por bando municipal en los distintos ayuntamientos como, por ejemplo, regar zonas verdes con agua potable.
En todo caso, desde Acosol aseguran que se trataría de una medida únicamente informativa y que aún se desconoce cuándo entrará en vigor. De haber en un futuro sanciones corresponderían a los diferentes ayuntamientos aplicarlas.
Cabe destacar que en otros puntos de la geografía como la comunidad catalana, donde ya se ha declarado la situación de emergencia por sequía, el gobierno autonómico ha anunciado su intención de sancionar económicamente a quienes hagan un consumo de agua superior a 200 litros por habitante y día.