El Consejo de Gobierno de Andalucía ha tomado conocimiento este martes de la declaración de emergencia para la ejecución de obras de la Instalación Desaladora de Agua de Mar (IDAM) de Marbella (Málaga) para lo que se destina una cantidad de casi 3,35 millones de euros.
Esta actuación pondrá fin a la situación crítica de esta desaladora por problemas funcionales y operacionales y que es fundamental para la calidad del agua, han señalado desde el Gobierno andaluz.
Esta intervención está declarada de interés de la Comunidad Autónoma de Andalucía dentro de las actuaciones que se llevan a cabo para paliar los efectos de la sequía, según han precisado a través de un comunicado.
El objetivo principal consiste en mejorar la calidad del agua desalada mediante la sustitución de cuatro bastidores antiguos de membranas de fibra hueca por dos bastidores nuevos de membranas de arrollamiento en espiral, suministros de tubos de presión, adaptación de las conducciones de alimentación, rechazo, agua producto y limpieza química, válvulas, accesorios, soportes y demás instrumentos, así como la sustitución de los colectores de acero inoxidable para que puedan seguir operativos.
Adicionalmente, se instalará un nuevo bastidor de segundo paso que va a permitir una mayor eficiencia y mejor aprovechamiento del agua al conseguir que sólo se rechace un 1,8% del caudal producido en el primer paso.