Dar una nueva vida a los residuos plásticos sí es posible. Este es el objetivo de ‘MAREA Plastic’ – Malaga Reaction Against Plastic- un proyecto liderado por los investigadores de la Escuela de Ingenierías Industriales de la UMA Óscar de Cózar y Carmen Ladrón de Guevara, que, a través de un proceso de economía circular, transforma los desechos en nuevos productos de valor.
Esta iniciativa de la Universidad de Málaga parte del movimiento internacional social ‘Precious Plastic’, que trabaja para crear máquinas a partir de componentes reciclados, pero da un paso más, con el diseño y la fabricación de nuevo equipamiento científico, que supera el desarrollado hasta ahora.
“Hemos realizado un estudio para mejorar las máquinas que ya estaban ideadas, y propuesto nuevas con otras utilidades, desarrolladas también mediante materiales reutilizados,”, explica la profesora del Departamento de Expresión Gráfica, Diseño y Proyectos Ladrón de Guevara, quien aclara que, para ello, ‘MAREA Plastic’ cuenta con un amplio equipo multidisciplinar de estudiantes, profesores e investigadores de la UMA, que trabajan en un taller ubicado en la Escuela de Ingenierías Industriales.
El proyecto comenzó en noviembre de 2020, gracias al segundo Plan Propio de Smart-Campus de este Vicerrectorado de la UMA y, actualmente, continúa inmerso en la fabricación de nuevos prototipos de máquinas, a la vez que ya empieza a obtener los primeros resultados: productos creados a partir de desechos plásticos (ceniceros, mosquetones, pinzas, maceteros…), y acuerdos con empresas.
Recolección
La recolección del plástico antes de que sea desechado de forma incorrecta es el primer paso del proceso. “No todos los plásticos valen”, explica la investigadora de la UMA, que aclara que, por el momento, estos llegan, en su mayoría, de la propia Universidad, pero que, en un futuro, cuando el taller esté completo se pretende abrir a toda la ciudadanía, “para que cualquiera pueda llevar sus desechos plásicos y obtener un nuevo producto de valor”.
Procesado
Una vez clasificado y limpiado, la siguiente fase del proyecto es triturar el plástico para su almacenamiento.
Para conseguirlo, además de las tres máquinas ideadas por el movimiento ‘Precious Plastic’, reproducidas y mejoradas por los investigadores de la UMA –trituradora, extrusora e inyectora-, el equipo científico universitario suma una bobinadora de creación propia y una lavadora de plásticos, que aún están en desarrollo.
Nueva Vida
El objetivo principal de este laboratorio portátil de la Escuela de Ingenierías Industriales es, apostando por un proceso de economía circular, conseguir que los desechos permanezcan dentro de la cadena productiva más tiempo, aumentando su vida útil en un entorno no industrial y disminuyendo, por tanto, el uso y consumo de materias primas.