La Junta de Andalucía ha destacado este lunes que ha reducido el porcentaje de la deuda sobre el PIB andaluz desde que Juanma Moreno preside la Junta de Andalucía, a pesar de la situación económica actual y de la crisis generada por el Covid-19.
Concretamente, se ha reducido del 22,1% al 21,9%, según datos del Banco de España al primer semestre de 2022 trasladados por el propio ente autonómico en un comunicado.
A 31 de diciembre de 2021, la deuda de Andalucía estaba casi tres puntos por debajo de la media de las comunidades autónomas. Y si se considera en función del número de habitantes, la deuda per cápita en Andalucía (4,393 euros) era un 35% inferior a la media de las comunidades autónomas españolas (6,676 euros). Asimismo, en función de los ingresos corrientes, la media de las comunidades autónomas era del 176% y en Andalucía del 119%.
«El Gobierno andaluz heredó una deuda de 35.439 millones de euros de los anteriores ejecutivos, que representaba el 22,1% del PIB. Los sucesivos gobiernos socialistas habían incrementado la deuda de la Junta de Andalucía desde 2007 en 28.262 millones de euros, desde los 7.177 millones de 2007 (4,8% sobre el PIB) a los 35.439 millones en 2018 (22,1%)», ha explicado.
Así, ha resaltado que en la actualidad se ha reducido esa deuda desde 2019 al 21,9% sobre el PIB y se ha cumplido «desde el primer momento con las tres reglas fiscales».
«En 2018, Andalucía fue la única comunidad autónoma que no cumplió ninguna de las reglas (límite de deuda, límite de déficit y regla de gasto). Y en 2019, con un Gobierno presidido por Juanma Moreno, se cumplieron las tres reglas por primera vez», ha indicado.
A pesar de quedar en suspenso en 2020 y 2021 las reglas fiscales a causa de la crisis generada por la pandemia de Covid-19, la Junta consiguió esos años un equilibrio técnico en cuanto al déficit y cumplió con el periodo medio de pago a proveedores.
Por último, la Administración ha resaltado que está realizando «un esfuerzo de contención de la deuda, que ha permitido aplanar el perfil de vencimiento, lo que convierte a la deuda en una más sostenible y fácil de pagar, y disponer de un colchón financiero, ya que se aprovecharon los momentos previos a la actual crisis monetaria para emitir deuda en condiciones ventajosas».