Los efectivos del dispositivo de extinción de incendios forestales de Andalucía, Plan Infoca, continúan trabajando día y noche para controlar el fuego que se inició el pasado miércoles en el término municipal de Pujerra y que quedó estabilizado el viernes a las 09.00 horas.
En estos momentos trabajan en el lugar seis grupos de bomberos forestales, tres técnicos de operaciones, cuatro agentes de medio ambiente y dos autobombas, según han informado desde el Plan Infoca. En total, 55 efectivos terrestres y sin medios aéreos; esto último supone que la situación es mejor que días atrás.
Así, han añadido, en declaraciones a Europa Press, que este lunes las temperaturas en la zona serán más elevadas que en días anteriores, en concreto se esperan 33 grados; y la humedad relativa desfavorable, por debajo del 30%. Desde el Infoca han recordado que desde que se estabilizó el incendio el trabajo se centra en apagar los puntos calientes dentro del perímetro.
La dificultad es que la humedad relativa está muy baja y esto impide que la vegetación recupere humedad por la noche y las reproducciones que se van apagando se vuelven a producir, han explicado, aclarando que «no es nada extraño en un incendio de estas características».
El incendio se declaró en la tarde del miércoles 8 de junio en el paraje La Resinera. El Teléfono 112 recibió la primera de más de una treintena de llamadas sobre las 15.04 horas. A las 17.05 horas se activó el nivel 1 del Plan de Emergencia por Incendios Forestales en su fase provincial, si bien, posteriormente, la evolución desfavorable del fuego y las complicadas condiciones meteorológicas hicieron que se activara el nivel 2 del plan y solicitara el apoyo de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
Así, se han desplegado hasta casi mil efectivos que han trabajado intensamente en las labores. El fuego se dio por estabilizado el viernes, pasando a nivel 0. Durante los trabajos, tres bomberos forestales del Plan Infoca resultaron heridos con quemaduras de diversas consideración.
Las llamas provocaron el desalojo de casi 2.000 personas de cinco núcleos poblacionales distintos, entre ellos el casco urbano de Benahavís y las urbanizaciones Montemayor, Marbella Club, Benahavís Hills y seis familias del núcleo de diseminados de Velerín Alto. En la noche del jueves comenzaron a regresar los primeros desalojados.